“El orden es la forma en la que la belleza depende”.
Pearl S. Buck
En la actualidad vivimos en un mundo lleno de actividades diarias y con los tiempos medidos para hacer cada una de las actividades cotidianas.
Sin embargo, el darnos el tiempo para fomentar en nuestros hijos el mantener el orden y la limpieza en sus pertenencias se podría ver como una inversión a largo plazo, pues si lo hacen de manera regular se podría crear un hábito en ellos y lograr que de manera natural mantengan orden y limpieza en sus recámaras, o cuidar sus útiles escolares, o realizar a cierta hora la tarea, entre otros.
A continuación, se mencionan algunas sugerencias para lograr que los niños inicien con los nuevos hábitos:
- Hay que recordar que cada cosa tiene un lugar dónde guardarse cuando la termine de usar.
- Establecer horarios para cada actividad e indicar el tiempo que durará.
- Colocar las cosas de los niños en lugares que sean accesibles para ellos en altura y tamaño.
- Guardar los juguetes después de usarlos, por ejemplo, con una canción para que sea divertido.
- Dar incentivos si a lo largo de la semana mantuvieron ordenados su recámara ordenada o sus útiles escolares.
- Siempre, como padres dar el ejemplo
De esta manera los niños aprenderán que el orden y la limpieza forman parte de su vida cotidiana o bien un estilo de vida, y cuando crezcan lo agradecerán.
Lic. Luis Fernando Villalobos Vélez
lvillalobos@clea.edu.mx